Mañana domingo tenemos previsto jugar Heraclea, la primera de las batallas entre los romanos y Pirro del Épiro. Tras un mes de marzo excesivamente atareado para mi gusto (apenas he puesto algo en el blog), llegamos por fin a la batalla del mes. Diversos compromisos entre los participantes han hecho que se alargara tanto su celebración, y ha sido finalmente este domingo el día en el que casi todos podían asistir. En esta ocasión no jugaré yo, sino que ejerceré de árbitro de la batalla. He diseñado el escenario pensando en poner en práctica varias ideas que me surgieron desde la última vez que jugamos antigüedad. La infantería ligera tendrá ahora un poco más de autonomía en el disparo. Anteriormente poseía tres disparos de jabalina. Cuando éstos se acababan la infantería ligera perdía su rol principal, el hostigamiento. Ahora sólo perderá una jabalina cuando saque 1, 2 ó 3 en la tirada de dado, permitiendo que se retarde la pérdida de jabalinas.
Por otro lado, he considerado que la formación de combate básica para todo tipo de tropa sea la línea o doble línea, ya que en otras ocasiones, se formaban columnas de combate de modo bastante irreal. He hecho esto porque considero que una columna representa una formación mucho más profunda de lo que en realidad eran. Una unidad de hoplitas, armados con lanza, no tiene la profundidad de una columna, ya que las últimas filas no ejercerían la acción ofensiva necesaria, como puede suceder con los legionarios romanos y la doctrina del sistema de relevos manipular. Sin embargo, sí he respetado la formación de combate en columna para la falange, por obvias razones, y es que los piqueros sí pueden mantener una disposición en profundidad debido a la longitud de sus picas, con las que pueden apoyar el ataque desde una cuarta y hasta una quinta fila.
También he introducido alguna variación en la figura de los elefantes, que comentaré tras la batalla por no desvelar alguna cosa que sucederá en la batalla. Sólo decir que la huida de los elefantes reflejará un poco más el caos que puede suponer la estampida sin control de los paquidermos, que puede perjudicar tanto a amigos como enemigos, así como un factor de combate mejorado contra caballería.
En fin, un escenario muy sencillo, sin excesivas complicaciones de terreno, que permite jugar todas las unidades y ver cómo se comportan en combate para futuras nuevas batallas de antigüedad, época que me atrae mucho y que supongo que potenciaré más a partir de ahora.
Un detalle que me enorgullece mucho es que todas las miniaturas de romanos que habrá sobre la mesa son mías y me las he pintado yo. Tengo ya dispuestas tres legiones republicanas enteras, con todas sus unidades: velites, hastati, principes, triarii y caballería. Creo que es un muy buen fundamento para representar muchas de las batalas republicanas más interesantes, tanto de las guerras púnicas como de cualquier etapa previa a la cesariana. He pintado una de las legiones de modo irregular, con los escudos diferentes, ya que con ella puedo representar la legión de esclavos alzada en la guerra contra Aníbal, o aliados latinos o simplemente para reflejar que en esa época, el armamento del legionario se lo costeaban ellos mismos, dando una apariencia u tanto irregular, en contra de la imagen uniforme dada principalmente por el cine, de las legiones romanas, que no será realidad hasta, al menos, las reformas de Mario, a finales del siglo II a.C..
Bueno, sólo me resta desear suerte a ambos equipos y que los dioses estén con ellos. Mañana se verán las caras en Heraclea.
Ave et vale
Comentarios
Megacles.
Francisco vestido de Pirro engaña a la caballeria romana aparentando dudas e inseguridades cuando en realidad queria alejarlas de nuestro flanco desprotegido. Los proboscideos dirijidos por el peor jugador de todos los tiempos se encaraba hacia los romanos confiando en que su mano tonta hiciera que los paquidermos se espendolaran hacia los legionarios. Mientras Jose se liaba a flechazos, jabalinazos, pedradas, salivazos e insultos contra cualquier romano que se pusiera a tiro, más que nada para que avanzaran y se pusieran a tiro de Chewak que lanzando las picas con "impetus" (que gran juego) puso la guinda a un gran plan ideado por Francisco. D. Francisco que una vez más demostraba su invencibilidad en juegos de antiguedad.
He dicho.
Megacles
P.D..- Magnífica simulación. Pedro ha hecho un gran trabajo tanto con la distribución de tropas como con las reglas especiales.