Ir al contenido principal

Nuestra batalla de Spicheren (1870)


Hay ocasiones en que una simulación con miniaturas deja de ser un "juego" para convertirse, con un poco de imaginación, en un reflejo del cruel rostro de la guerra. Y este ha sido el caso de la batalla que representamos el pasado 17 de diciembre, Spicheren, que aconteció en el marco de la guerra franco-prusiana de 1870-1871.

En este conflicto cristalizaron muchos de los avances en el campo armamentístico desde las guerras napoleónicas. Así, se desarrollaba el fusil de retrocarga, como el excelente fusil de aguja Chassepot francés, de ánima rayada y gran alcance, o la Mitralleuse, precursora de las actuales ametralladoras. La artillería también experimenta un desarrollo importante, siendo los cañones alemanes Krupp una buena muestra. De excelente precisión y largo alcance, permitían el tiro parabólico, siendo un precedente para los bombardeos de posiciones enemigas. En definitiva, toda una serie de adelantos que hacían la guerra muchísimo más cruenta y letal de lo que había sido hasta ahora. Se podría considerar, de hecho, a la Guerra Franco-Prusiana como la primera guerra contemporánea, ya que las tácticas napoleónicas quedarán ya obsoletas, barridas de algún modo por la tecnología.

Nuestra batalla de Spicheren pretendía reflejar de algún modo estas características, con lo que dotamos, como regla de escenario, a los cañones de un mayor alcance y posibilidad de disparar por encima de tropas propias. Junto a eso, se aumentaban las distancias de disparo de los fusiles y se contemplaba la columna volante como formación de combate por excelencia. Otra peculiaridad del escenario era que el desplazamiento de tropas entre un punto y otro se realizaba mediante ferrocarril, con lo que resultaba muy dinámico el llevar unidades hacia los puntos más complicados. En definitiva, el escenario prometía una tarde de acción.

Sin embargo, el regusto que me dejó esta batalla, pese a pasarlo estupendamente, rebasó en cierto modo el espíritu del juego para hacerme pensar en lo que subyace tras cada escenario que representamos. 

Mejor me explico. 

El comienzo de la batalla se situó sobre una zona en disputa entre nuestras posiciones francesas, en torno a un pequeño pueblo y una zona de abastecimiento de carbón y las líneas prusianas. En una estrecha franja de terreno se inició una carnicería de una envergadura que pondría los pelos de punta. Mientras que nuestras unidades eran batidas constantemente por las baterías prusianas y las bajas comenzaban a hacer mella en algunas unidades, los prusianos se ponían en su avance a tiro de los mortales Chassepot y de nuestra artillería, que también hicieron terribles bajas a su avance. La verdad es que por un cochino trozo de tierra, un objetivo menor, por decirlo de algún modo, caían soldados por doquier. Las unidades perdían su cohesión en cuestión de minutos y todo por conseguir controlar la dichosa zona de carbón que, para más disparate, tras haberla conseguido, los prusianos tuvieron que desguarnecerla, agobiados por los disparos de artillería y fusilería que se concentraban sobre ellos. 

Por nuestra parte, y tratando de arrebatar la ventaja obtenida por nuestros adversarios, decidimos enviar algunas unidades para reconquistar la carbonera... La primera unidad que consiguió poner un pie sobre el objetivo fue eliminada en tan solo un turno, al caer sobre ella toda la fuerza de los Krupp prusianos. ¡Dios mío!. Si trasladáramos eso a la realidad, en tan sólo media hora habrían muerto o desaparecido toda una unidad de aproximadamente 1.200 o 1.600 hombres. La verdad es que me quedé un poco traspuesto al darme cuenta de la barbaridad a la que había asistido... Y creo que después de eso, todos replanteamos la situación. Poco a poco, tanto nosotros como los prusianos íbamos retrocediendo hacia donde fuera que se estuviera fuera del alcance de los terribles cañones.  Pese a ser un juego, quizá en la realidad el espectáculo que debía ofrecerse sería bastante siniestro. Una zona destrozada, llena de cadáveres y cráteres de obuses, humo, lamentos, vacía, vacía... mientras que las tropas de cada bando, asustadas y aterrorizadas por lo presenciado, se miraban desde posiciones seguras, temiendo que les ordenaran avanzar en cualquier momento. 

Llegados a ese momento, la batalla en realidad tenía pocos visos de ganarse por nuestro bando, ya que sólo obtendríamos la victoria enfrentándonos a los prusianos y consiguiendo hacer más bajas que ellos a nosotros. Una apuesta de sangre en la que no teníamos las de ganar. Tras mantener la dignidad unos turnos más, finalmente decidimos abandonar, ya que no había necesidad de que muriera más gente.

Y es que en más de una ocasión no debemos olvidar que hacemos recreaciones acerca de algo que es serio, cruel y mortal. Hemos de ser conscientes de ello. Se que me gusta lo que hago, que es un juego al fin y al cabo, pero en esta ocasión lo patente de lo real me hizo estremecer.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Como siempre tus comentarios perfectos sobre la batalla, pero esta vez casi me haces llorar.
Anónimo ha dicho que…
Soy jugador de wargames y tienes toda la razon. A veces, despues de la batalla no puedo evitar el encontronazo de sentimientos entre la diversion y la amargura de haber representado uno de los peores aspectos de la humanidad... no entiendo todavia como me puede gustar tanto pintar y jugar a esto. El hecho es que cuanto mas juego, mas conscientes somos mi grupo y yo de lo que la guerra (sea en la epoca que sea) supone, y mas "pacifistas" somos. A veces me he planteado dejarlo, me pregunto ¿como puedo jugar con algo tan serio? pero en fin aqui sigo, supongo que sera por el reto mental, el pintado o los buenos momentos con los amigos y el indiscutible atractivo de lo militar.
Sin embargo, en realidad rechazo la guerra no me gusta y si podemos evitarla mejor. Que juegue a esto es quizas una de las mayores contradicciones de mi vida... no se donde lei que el hombre es todo el una gran contradiccion.

Muy bueno el post me ha he hecho pensar y ver que no soy el unico que siente eso a veces cuando juega.
Pedro ha dicho que…
De hecho, esa misma contradicción me la planteo yo muy a menudo.

Mi afición por las batallas, las guerras, los soldados y las armas están enfrentadas a mi carácter, y pese a saber lo negativo que es todo lo relativo al tema bélico, no puedo evitarlo, me apasiona.

Una cosa curiosa esta, si Señor. Me lo tendré que hacer mirar...
Anónimo ha dicho que…
Yo creo que mas por lo belico, nos gusta la narracion historica y lo historico, la estrategia y hasta el heroismo de esas epòcas,estoy con vosotros en que lo que es la guerra no nos gusta, mas voy a decir, yo creo que seria incapaz hasta en una guerra de disparar a una persona y poder hacer un daño. ¿que opinais? Manolo

Entradas populares de este blog

Romanos imperiales y últimos encargos

Tras el verano, entre encargos de pintura y vacaciones, decidí darme un poco el gusto de pintar por deleite, por el mero hecho de pintar, vaya, y me decidí por una caja de romanos imperiales de Warlord  que tenía aparcada desde hace algún tiempo, también a raíz de releer nuevamente las apasionantes historias de Simon Scarrow sobre el Optio Cato y el Centurión Macro. La verdad es que hacía ya mucho que no pintaba miniaturas por encima de los 15 mm y estaba necesitado de un poco de aire nuevo, así que me dediqué a ellas. Las miniaturas son en 28 mm., en plástico, con un precio muy accesible y con posibilidades de personalizar hasta cierto punto a  las figuras. Tienen gran fuerza y eso se traduce en un resultado realmente vibrante. Las he acabado montando en peanas individuales para formar una unidad de Warhammer Ancient Battles, que queda realmente bien. Aquí os dejo unas fotos del resultado: La figura del Cornicen , que sirve para transmitir las órdenes a la unidad en pleno co

Plastic Soldier Review

El otro día, mirando cosillas en la red, me encontré con una curiosa y extremadamente útil página. Se trata de Plastic Soldier Review , que trata acerca de las diferentes marcas de soldados de 1/72 en plástico. Si, aquellos soldaditos con los que muchos de nosotros nos iniciamos en el mundillo de la miniatura y del juego de guerra. Ha sido especialmente grato localizar la referencia a aquellos alemanes chaparros de Matchbox, de los cuales aún conservo algunos, o la clásica referencia de Esci de los Panzergrenadier alemanes. Es una muy interesante herramienta para aquel coleccionista o wargamer de cualquier época interesado en esta escala (muy atractiva por el precio que suele presentar, bastante más económico que el plomo), ya que nos permite ver qué miniaturas existen para un determinado período, cómo son, o cuántas van antes de comprar el producto. La verdad es que merece la pena darle un vistazo, aunque sólo sea por nostalgia. La web está actualizada constantemente y muestra las

Encargo para NaW finalizado

A lo largo de las últimas entradas he ido poniendo fotos de un encargo que he realizado de un combinado franco-italiano-polaco para NaW. Os pondré unas fotos ahora del encargo finalizado al completo, así como de las últimas figuras que pinté para esta tarea. Ahí van: Todo el grupo finalizado Grupo de mando francés Infantería de línea francesa Las figuras del último batallón, el francés, son también Warmodelling, sin embargo, bien sea porque son molde más antiguo o qué se yo, no tienen la definición de las figuras de los polacos. No obstante, no dejan de ser unas estupendas miniaturas.