Vaya, ha muerto Gary Gigax. Una pérdida significativa para todos los que están o hemos estado en estos mundillos del dado y la fantasía. La verdad es que entre esta muerte y la del gran ilustrador Angus Mc Bride a finales de 2007 estoy bastante apenado. Como mi amigo, mis hermanos y yo crecimos con la presencia del Dungeons & Dragons de Gary Gigax, así como de la visión de Angus Mc Bride de El Señor de los Anillos, con cuyas ilustraciones me ilusionaba y, en su visión histórica, hoy en día sigo maravillándome. Para mi, Gigax me hizo ver que era posible, con unos pocos dados y algo de imaginación, embarcarte en las más asombrosas aventuras; Mc Bride les dio imágen a aquellas magníficas aventuras (mis personajes, siempre humanos, buscaban un reflejo de sus ilustraciones).
En fin, un recuerdo para ambos dos creadores desde una época el la que el reinado de la pleisteishon y otros juguetillos electrónicos han nublado un poco la imaginación y la inventiva.
Tras el verano, entre encargos de pintura y vacaciones, decidí darme un poco el gusto de pintar por deleite, por el mero hecho de pintar, vaya, y me decidí por una caja de romanos imperiales de Warlord que tenía aparcada desde hace algún tiempo, también a raíz de releer nuevamente las apasionantes historias de Simon Scarrow sobre el Optio Cato y el Centurión Macro. La verdad es que hacía ya mucho que no pintaba miniaturas por encima de los 15 mm y estaba necesitado de un poco de aire nuevo, así que me dediqué a ellas. Las miniaturas son en 28 mm., en plástico, con un precio muy accesible y con posibilidades de personalizar hasta cierto punto a las figuras. Tienen gran fuerza y eso se traduce en un resultado realmente vibrante. Las he acabado montando en peanas individuales para formar una unidad de Warhammer Ancient Battles, que queda realmente bien. Aquí os dejo unas fotos del resultado: La figura del Cornicen , que sirve para transmitir las órdenes a la unidad en pleno co
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